Gerópolis fue parte de la organización del evento.

Más de 150 asistentes tuvo la jornada “Diálogos ciudadanos: Detección precoz de las demencias e inclusión social”, organizada por la Mesa Regional Intersectorial del Plan Nacional de Demencia que encabeza la Seremi de Salud y de la cual forma parte el Centro Gerópolis de la Universidad de Valparaíso. La iniciativa tuvo por objetivo visibilizar la importancia de la detección temprana de la demencia en el contexto clínico, comunitario y familiar.

La actividad, desarrollada en el Centro Integral de Atención al Estudiante UV, se llevó a cabo en dos bloques: el de la mañana estuvo dirigido a profesionales de los Servicios de Salud Valparaíso-San Antonio, Viña del Mar-Quillota y Aconcagua, mientras que el bloque de la tarde, a la sociedad civil.

Participaron como expositores los docentes de la UV Gustav Rohde, Carolina Ruiz-Tagle y Alonso Ortega de las escuelas de Medicina, Enfermería y Fonoaudiología, respectivamente; Daniela González, profesional de la División de Prevención y Control de Enfermedades del Ministerio de Salud; Cecilia Palacios, presidenta de la Asociación de Cuidadores de Personas con Alzheimer de Viña del Mar GAFA; Mariella Marazzi, directora de la Fundación Neuroplas; y Edith Canipani, beneficiaria de la Fundación Neuroplas.

La directora ejecutiva de Gerópolis, Viviana García, indicó que “existe un grupo de alteraciones cognitivas y tipos de demencias que están asociadas a la edad, sabemos que a mayor edad hay más probabilidades de desarrollarlas, como es la demencia tipo Alzheimer. Nuestra región tiene un porcentaje importante de personas mayores, por lo tanto, es muy relevante generar este tipo de iniciativas, no solo por el impacto que tiene la demencia en la propia persona que la padece, sino que también por el impacto en la familia y entorno”.

Por su parte, el encargado de la Unidad de Salud Mental de la Seremi de Salud, Nicolás Díaz, destacó que la jornada es el resultado de un trabajo intersectorial que involucra la participación de distintos actores. Además, sostuvo que “a nivel mundial, alrededor de 35 millones de personas tienen hoy algún un tipo de demencia, cifra que se duplica cada veinte años. La demencia es un tema no menor que debemos tener en vista”.

Factores protectores

“Riesgo de deterioro cognitivo con la edad: Detección precoz de la demencia” se tituló la charla inaugural realizada por Gustav Rohde. Durante su exposición, el neurólogo señaló que existen cuatro funciones cerebrales que van cambiando a lo largo del ciclo vital, sin disminuir la funcionalidad de las personas: velocidad de respuesta, despliegue de la memoria, destreza visuo-espacial y flexibilidad mental. Asimismo, subrayó que “todos estos cambios no logran tener un impacto tan relevante para transformarse en lo que nosotros llamamos enfermedad”.

En relación con los factores protectores asociados a las demencias, afirmó que “el entrenamiento cognitivo en modalidad específica tiene un impacto real, estadísticamente medible, que puede mejorar en un 17 por ciento la memoria, un 26 por ciento el razonamiento y hasta un 87 por ciento la velocidad de procesamiento. Probablemente los números no son muy impactantes, pero desde el punto de vista de la funcionalidad puede ser relevantes para el paciente”.

El académico agregó que “junto con el entrenamiento cognitivo, la actividad física y la actividad recreativa son factores protectores importantes. Muchas veces los médicos no le dan la importancia adecuada, se han acostumbrado a estresar a los pacientes para que se entrenen, dejen de comer ciertos alimentos, salgan a correr o a caminar, y la verdad es que vale la pena juntarse con amigos, ver una película, conversar. Hay evidencia clara de que la actividad social y lúdica mejora la capacidad cognitiva”.

Por otro lado, explicó que “no existe ningún medicamento que sirva para la memoria, lo que sí existe son algunos fármacos que se llaman procognitivos, que tienen algún efecto en pacientes con enfermedad de Alzheimer o algunas otras demencias, pero ninguno de esos medicamentos tiene efectos medibles sobre la memoria, es decir, no tiene ninguna sentido que las personas los usen si no tienen un cuadro demencial”, concluyó.