Inédito espacio virtual fue impulsado por la académica Alondra Castillo en el marco de las prácticas de Fonoaudiología en el Centro Gerópolis UV.
Estimular y potenciar la comunicación oral en las personas mayores mediante recursos provenientes del canto, la música, la danza y el juego fue el objetivo del taller “Los miércoles al son de tu voz”, desarrollado en el Centro Gerópolis de la Universidad de Valparaíso en el marco de las prácticas profesionales de Nelly Maldonado y Ninoska Zapata, egresadas de la carrera de Fonoaudiología. La iniciativa fue liderada por la académica Alondra Castillo, con la supervisión institucional de la coordinadora de Vinculación de Gerópolis, Javiera Basáez.
Se impartieron dos versiones del taller durante 2021, en modalidad virtual. Cada versión contempló el trabajo con dos grupos de personas mayores, quienes participaron en seis sesiones en total.
“Abordamos contenidos fonoaudiológicos, sobre todo en las áreas de habla y voz, aplicados a través de recursos musicales. En ese sentido fue súper interesante llevar a la práctica el conocimiento que he adquirido durante estos años de formación y poder fusionarlo con la música, que es tan cercana para las personas y que disfrutan tanto”, señaló Ninoska Zapata.
Elvira Corradi fue una de las participantes de la segunda versión del taller, quien se conectó desde la comuna de Las Condes:
“Fue una experiencia maravillosa y renovadora, nos entregaron muchas herramientas para mejorar nuestras condiciones de salud, que en esta etapa están de por sí alicaídas. Realizamos distintos ejercicios, por ejemplo, soplar entre los dedos de la mano y repetir una nota, cantar e ir subiendo hacia tonos agudos. También nos conectamos con nuestras emociones y recuerdos a través de una canción preferida. Aprendí a escuchar los sonidos de los instrumentos musicales en una canción y, además, a reconocer mi propia voz y sonido”, detalló.
Fonoaudiología y musicoterapia: una fusión virtuosa
La profesora Alondra Castillo es fonoaudióloga, Magíster en Musicoterapia y Doctora en Salud Pública, con una extensa trayectoria en el ámbito del envejecimiento y la vejez.
“La fonoaudiología y la musicoterapia son dos disciplinas que a mí me hace mucho sentido unir. A partir de mi formación comencé una línea de proyectos de tesis en los que implementamos programas de intervención para diferentes ámbitos desde la comunicación humana utilizando recursos musicales, abordando, por ejemplo, la tartamudez y la enfermedad de Parkinson. Esto permitió consolidar una línea de trabajo e investigación en la que entendemos que la musicoterapia busca potenciar aspectos comunicativos de las personas a través de recursos que sean sonoros y la fonoaudiología potenciar los procesos comunicativos mediante diversas estrategias, donde la música pasa a ser un recurso más”, sostuvo.
Asimismo, añadió:
“A veces la música viene a ser el único medio de comunicación para algunas personas, en casos de trastornos del espectro autista o personas que tienen algún diagnóstico de demencia, en esos casos la música puede ocupar aquel rol auxiliar que permite que el proceso comunicativo se canalice a través de una ruta que puede ser, por ejemplo, una canción”.
Por otra parte, subrayó que la música estimula esferas que sobrepasan el ámbito fonoaudiológico.
“Yo soy terapeuta de voz, trabajo musculatura de la voz, respiratoria, articulatoria y deglutoria, busco potenciar que esa musculatura este fuerte y firme, pero es inevitable que si tú compartes una canción se activen elementos que son emocionales y hay que hacerse cargo de ese proceso, ahí se complementa la perspectiva fonoaudiológica siendo yo musicoterapeuta. La formación desde la musicoterapia me ayuda a abordar aquellas situaciones que son más complejas y en cierto modo se humaniza profundamente el proceso terapéutico”, puntualizó.
Entre los ejercicios desarrollados durante el taller, cada participante compartió una canción y una fotografía, relatando los recuerdos generados por la canción en relación con la fotografía.
“Ves a la persona más allá de la pantalla y de una sesión fonoaudiológica. Luego de este ejercicio realizamos una actividad en la cual tuvimos que hablar de una manera muy exagerada, donde no importó hacer un poco el ridículo, porque ya habíamos generado un espacio de confianza, apoyándonos en el afecto, conteniéndonos y observándonos en nuestras historias. La terapia entra por unos poros que una abre a través de un proceso que es más bien emocional y social”, manifestó.
El taller se replicará durante 2022, junto al taller de envejecimiento saludable guiado por la profesora Cristina Carmona. Consultas al correo