Personas mayores practican yoga integral en Gerópolis UV
El taller es desarrollado por Pamela Molina, integrante del programa Agentes Multiplicadores de Salud.
Con la finalidad de mejorar su calidad de vida, un grupo de personas mayores practican yoga integral en la sede del Centro Gerópolis UV desde el mes de marzo. El taller es desarrollado por la profesora de yoga Pamela Molina, quien participa activamente en el programa de formación Agentes Multiplicadores de Salud (AMS) de Gerópolis.
“No estaba planeado en mi vida hacer un taller de yoga para adultos mayores, pero como comencé a participar en muchos cursos de Gerópolis, sentí que debía retribuir de algún modo todo lo aprendido y devolver con la misma moneda, que en el fondo era compartir mi conocimiento y darle la posibilidad a las personas mayores de sanarse y alegrar su espíritu”, explicó Pamela Molina.
Además, señaló que la vinculación con Gerópolis ha sido su primera experiencia comunitaria: “Nunca antes había participado en una iniciativa con la comunidad, no porque yo no quisiera, sino porque no se había dado la oportunidad. Ahora que estoy haciendo el taller, se me ocurrió que podría replicarlo en espacios como el consultorio de mi barrio o la junta de vecinos”, manifestó.
Javiera Basáez, coordinadora del programa AMS, destacó la iniciativa de realizar un taller de yoga sin esperar una retribución monetaria a cambio. “Dadas las condiciones económicas que a veces tiene este grupo etario, es muy difícil pagar un taller de este tipo, aun conociendo los múltiples beneficios del yoga. Pamela, de manera totalmente voluntaria y servicial, decide realizar este taller y aquí en Gerópolis le hemos facilitado todo lo que está a nuestro alcance”, indicó.
En tanto, María Alcaíno, una de las participantes del taller, expresó que “ha sido fabuloso, una experiencia muy linda que me encanta, creo que este tipo de actividad física nos hace falta a las personas de la tercera edad, porque no es brusca y nos tranquiliza. Yo sufro de artrosis y escoliosis y he sentido que los dolores han ido bajando con el yoga; me siento cómoda, tengo buenas compañeras y la profesora es excelente”.
En relación a los beneficios del yoga integral, Pamela Molina afirmó que “clase a clase veo los avances físicos; por ejemplo, una de las participantes se operó una cadera, al principio se movía muy poco y ahora la veo haciendo las posturas. También hay una persona mayor que tiene Parkinson y al principio no podía meditar, no podía relajarse y ahora lo está logrando. Creo que todas han puesto mucho de su parte”.
A su vez, sostuvo que “el yoga no es solamente desarrollo físico, sino que también tiene que ver con el espíritu, con el alma. Como dicen los maestros, el yoga es conectarse con el todo, en el fondo es cultivar el contentamiento y la alegría, pero también expresar la tristeza. Existe un cariño entre las participantes, sienten un aprecio mutuo y eso es precisamente una forma de desarrollo espiritual que nace del amor y de la práctica del yoga”, concluyó.