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La Tribu de las mujeres sabias

22 de Enero 2021

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Columna de opinión de Antonia Valenzuela, pasante del Centro Gerópolis UV.

Cambia lo superficial
Cambia también lo profundo
Cambia el modo de pensar
Cambia todo en este mundo

Cambia el clima con los años
Cambia el pastor su rebaño
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño

Destacar e iniciar con los versos escritos por Julio Numhauser y popularizada por la poderosa voz de Mercedes Sosa, invita a sumergirse en la melodía que ha acompañado constantemente a nuestros hogares latinoamericanos, a nuestros hogares andinos, protegidos por la cordillera, el mar y el cielo. Sumergirse en la memoria colectiva y activa de nuestra sociedad, las letras, plasman el fluir de la vida humana y configuran un acto revolucionario de contribuir al no olvidar la historia, a las personas, a los momentos.

El mundo cambia en un instante, y con él, los individuos se adaptan, se acoplan, se asemejan y siguen su paso; no obstante, la sociedad, la juventud, Chile, ha olvidado a su colectividad, su tribu, a su memoria andante, a su historia.  

Poder participar en la continuidad de la comunidad del Círculo de Mujeres 2020/2021 motivado por el centro Gerópolis, permitió hacer alzar las voces de una importante parte de las mujeres protectoras de nuestra memoria y participes de la creación del rol histórico de la mujer en nuestro país a través de las diversas generaciones.

La idea del círculo, el inicio y termino en un mismo punto, vale decir, la circularidad de tornar a un origen, a un recuerdo, a una memoria del regreso. Recordar lo que cada una hizo por contribuir a una localidad más justa, más igualitaria para sus compañeras mujeres, para su tribu del hacer, del deshacer, para el volver a construir la tierra que compartimos, cambiar lo superficial, cambiar el modo de pensar, cambiar lo que no cambio ayer para que mañana pueda cambiar[1] y, así, poder darle una frecuencia a los frutos que dejaron los sueños que cada una plantó en los campos que habitaron, habitan y habitarán.

Recordar que la tribu, genera unidad, fuerza y poder; recordar que la sabiduría existe en cada persona mayor que nos sonríe con su mirada y acaricia con sus palabras, la que nos paraliza y activa con sus bibliografías, testimonios y percepción crítica del mundo.

Continuar con la permanencia del espacio del Círculo de Mujeres tanto como medio metafórico, palpable en la añoranza de nuestra construcción como comunidad y colectivo, tangible en las danzas circulares de los rituales ancestrales, de los indígenas, de las machis, de las brujas que guiaban y acompañaban a las almas vivientes de la naturaleza. Y como espacio reflexivo y de lucha, creado y divulgado por cada una de las participantes de la tribu, que con sus personalidades y energía conformaron el sentir de un himno que viaja de manera transversal en cada rango etario, por ello y gracias a ellas que “retiemble sus centros la tierra al sororo rugir del amor”.[2]

[1] Julio Numhauser | Mercedes Sosa "Todo cambia"

[2] Viviana Quintana “Canción sin miedo” 

Antonia Valenzuela, estudiante de Licenciatura en Letras Hispánicas con mención en Lingüística y Literatura de la Pontificia Universidad Católica de Chile, realizó una pasantía en el Centro Gerópolis entre diciembre 2020 y enero 2021. Durante su pasantía, Antonia dio continuidad al Círculo de Mujeres desarrollado por la psicóloga Evelyn Díaz, en el marco de su proyecto educativo para obtener el grado de Magíster en Educación para la Inclusión, la Diversidad y la Interculturalidad de la Universidad de Valparaíso.